25 sept. 2025

La ganadería puede coexistir con fauna chaqueña, afirman

Estudio. El informe  sostiene que es posible la convivencia entre la ganadería y la fauna.

Estudio. El informe sostiene que es posible la convivencia entre la ganadería y la fauna.

Buscando conservar la fauna y el bosque dentro de las propiedades privadas de ganaderos en el Chaco, la Wildlife Conservation Society (WCS) emprendió un trabajo en conjunto con ellos, el cual demostró que mediante sencillas prácticas se puede desarrollar la ganadería sin alterar la vida silvestre.

Con estas medidas llamadas técnicas antidepredatorias se disminuyó entre 60% y 70% la pérdida de la fauna en dichas propiedades, explicó Laura Villalba, coordinadora del estudio. En esta etapa participaron 12 propietarios que abarcan más de 200.000 hectáreas del Chaco Central, asociados a la Asociación Rural del Paraguay (ARP) y de la Cooperativa Neuland.

Ante la veloz desaparición de las especies, la WCS se acercó a los propietarios privados del Chaco, teniendo en mente a la especie del jaguar, que es un animal emblemático, por lo que representa: su presencia indica que hay un bosque en buen estado, explicó Villalba.

“Elegir entre conservar una especie y producir no es fácil”, reconoció la profesional. Por ello, repensaron las acciones y concluyeron que lo más efectivo sería trabajar con los propios ganaderos. La situación repetitiva era que, al introducir el ganado en el hábitat natural de los felinos, estos lo identificaban como alimento y lo consumían. Entonces los productores optaban por asesinar a los animales para proteger al ganado. “Pierdo 150 cabezas por año con los jaguares. Eso es como G. 450 millones decían en el 2012 los ganaderos”, recordó Villalba.

La solución fue la implementación de técnicas antidepredatorias: luces led, cencerros y cercos eléctricos. Con estas medidas se ha reducido la pérdida de la fauna hasta en un 70%. “Demostramos que la ganadería puede ser muy amigable con la fauna”, señaló Villalba. Si estas técnicas se combinan con buenas prácticas ganaderas, se lograrán inclusive mejores resultados, agregó.

El vicepresidente segundo de la ARP, Nicolás Burró, fue uno de los propietarios involucrados en este proceso. “Gracias a las cámaras trampa que se colocaron, nos dimos cuenta de la cantidad de animales que tenemos”, señaló. Celebró los resultados y dijo que será importante un proceso de educación para afianzar lo logrado.

“No podemos siquiera imaginar la cantidad de alimentos que va a necesitar el mundo, por eso estos planes (de conservación) tienen que ser con los productores. Estamos a tiempo de hacer muchas cosas”, manifestó por su parte María del Carmen Fleytas, directora del WCS, durante la presentación de los resultados.