Indicó que la idea no está sustentada en un informe técnico y que en su experiencia como presidenta del Frente Parlamentario por los Derechos de la Niñez y la Adolescencia en cuatro años, ningún experto habló de que esa sea una solución viable.
“Los programas de alimentación escolar juegan un papel clave para cuidar a los niños a desarrollar su potencial. Tiene objetivos claros que se vinculan con mejorar las condiciones de nutrición, implementar educación alimentaria, la permanencia en instituciones escolares y no podemos trasladar la ineficiencia ni argumentar la corrupción como centro de instalación de políticas públicas, eso es trasladarles a las familias la inoperancia del Estado en el combate a la corrupción”, expresó en la 1020 AM.
La legisladora recordó que no se trata de un proyecto nuevo, ya que toda la idea es del diputado de Hagamos Carlos Rejala de hace dos años, sin estudio técnico, indicó la parlamentaria, sino solo con eslóganes como el Pytyvõ escolar. “No podemos comparar la inversión que se hace en el tema alimentación escolar con otro tipo de subsidio como Tekoporã, o Abrazo, para hablar de un programa que hoy está vigente y tiene trazabilidad. Con Abrazo se da trazabilidad con la tarjeta de vacunación, matriculación del niño. Cómo vas a hacer la trazabilidad de la comida con 200.000 guaraníes mensual. Muchas cosas no cierran, hoy tenemos que combatir la obesidad, ¿con 200.000 se puede realmente alimentar de manera balanceada a los niños?”, señaló.
Finalmente, pidió dejar de pensar en las políticas públicas como un gasto. “Son una inversión y eso está determinado en estudios”, dijo.