Durante años, el legislador derechista Jair Bolsonaro, favorito para ganar la presidencia de Brasil en las elecciones de octubre, ha sido noticia por las razones equivocadas.
Captó la atención a nivel nacional en 2014, cuando le dijo a una congresista en el recinto de la Cámara Baja: “No la voy a violar, porque usted no se lo merece”.
Desde entonces, sus comentarios ofensivos contra negros, homosexuales e indígenas han generado controversia y han seducido a un séquito de usuarios de las redes sociales que dicen estar hartos de lo que llaman la “corrección política” de sus críticos.
Sin embargo, las tácticas de choque que una vez lo llevaron a las primeras planas de los periódicos podrían estar dando menores resultados.
A pesar de su fuerte respaldo en las encuestas, el ex capitán del Ejército tiene una menor cobertura en los principales medios de comunicación que sus rivales, incluso menos que uno con una fracción de su apoyo, según investigadores de la Universidad del Estado de Río de Janeiro (UERJ). REUTERS