Indicó que los datos aportados por el ahora imputado, Wilmar Rodríguez, medio hermano de la joven fallecida Romina Ayelén Peralta Rodríguez, durante la reconstrucción de los hechos cambió rotundamente su versión dada en la sede policial y ante la Fiscalía. Detalló que una vez que fue puesto en el dormitorio donde ocurrió el hecho, el joven por primera vez habló de un arma de fuego.
Sin embargo, en la ocasión, Wilmar instaló una versión de supuesto suicidio por parte de su hermana, pero lo llamativo es por qué ocultó el arma de fuego luego de lo ocurrido, y la versión que dio de la explosión del vapeador, explicó el comisario, sobre puntos que no cuadran en el relato del principal sospechoso.
Respecto al arma, el joven declaró que una persona le empeñó el pasado sábado. El procesado también relató que, tras el suceso, entregó el arma a una persona y que esta la llevó a otro por pedido suyo. Estas personas ya están reconocidas por los investigadores y en las próximas horas, confían que se localizarían el arma.