El viceministro de Empleo y Seguridad Social, Daniel Sánchez, insiste en la necesidad de priorizar las políticas de seguridad y salud en el trabajo, para que la reactivación productiva y del empleo sea segura, saludable y sostenible en el tiempo. Esto ante la reactivación de más sectores económicos mediante la entrada en vigencia de la fase 2 de la cuarentena inteligente.
El subsecretario insiste que en esta etapa de apertura es fundamental la participación de los empleadores y los trabajadores, en lo que refiere en la gestión y aplicación de los protocolos de seguridad y salud ocupacional.
“Es crucial, en esta etapa, invertir en la implementación de una fuerte formación y educación en seguridad y salud para todos los actores del mercado laboral”, expresó.
Retroceso. En ese sentido, advirtió sobre la posibilidad de volver a la fase anterior, o, en peor de los casos, a la cuarentena total y estricta, en caso de registrarse el aumento incontrolable de contagios. En caso de que esto ocurra, será necesario volver a las medidas más firmes orientadas a proteger al trabajador, como a limitar impacto en las empresas, dijo Sánchez.
“Para evitar un retroceso de fase, las empresas deben garantizar el cumplimiento de los protocolos sanitarios en el trabajo, que incluya inducción al personal, adopción de horarios de entrada y salidas escalonadas para evitar aglomeraciones, rutinas de desinfección y sistema de lavado de manos, uso obligatorio de mascarillas, y un protocolo en caso de que algún trabajador presente síntomas”, sugirió.
Afirmó que seguirá recorriendo empresas para corroborar la situación de los trabajadores e instar a todo el sector comercial y productivo a seguir con los protocolos sanitarios para que se pueda seguir avanzando en la reactivación total de la economía, sin que ello represente un riesgo para la salud de los trabajadores. “Si la economía se mantiene activa, también se mantiene el empleo”, expresó.