Antes del escándalo de las facturas falsas que fueron detectadas en la rendición de cuentas de la Gobernación de Central, ya existían sospechas de mal manejo del dinero, debido a que el gobernador cartista, Hugo Javier González transfería a dos organizaciones casi todo su presupuesto, sin comunicar como se usó el dinero.
Ese es el caso de los G. 8.442.741.304, que transfirió Hugo Javier en el 2019 a la ya conocida Fundación Centro Profesional (CIAP) y a la organización Plantemos Conciencia. CIAP es también la organización que rindió cuentas con facturas falsificadas, de los G. 5.105 millones que le fueron transferidos para la ejecución de obras en el marco de la reactivación económica.
La Contraloría General de la República dio a conocer en febrero un informe de la utilización de los fondos transferidos en el 2019, en donde en las observaciones, pedía que la gobernación y las organización acerquen los documentos que respalden la ejecución de las obras que mencionan en su rendición hecha a medias.
Ayer los concejales de la bancada liberal fueron a reiterar la conclusión de ese informe y de otros expedientes.
“Los auditores nos manifestaron que la gobernación no remitió las documentaciones de respaldo. El gobernador llevó algunos documentos pero no todos, y algunos incluso están borrosos y algunas notas no fueron respondidas”, informó el concejal Adrián “Billy” Vaesken.
De esta forma, la Contraloría no cuenta con todos los informes de las organizaciones que recibieron dinero de la gobernación, por lo que se imposibilita contar con un informe conclusivo.
Entre las observaciones, se puede ver que se hicieron transferencias en fechas consecutivas a la organización CIAP, sin tener en cuenta los procedimientos.
La Gobernación, en tiempo récord, destinó más de G. 3.500 millones el 25 de octubre; más de G. 2.500 millones el 29 de noviembre y G. 441 millones el 5 de diciembre. Estos pagos se realizaron en 18 cheques.
Cabe recordar que el representante de CIAP es el ex árbitro de la APF y contador Tadeo Álvarez Cristaldo y el tesorero, es el árbitro Paulino Palacios. En tanto, Plantemos Conciencia, está representada por el psicólogo de 30 años Esteban Álvarez Quevedo.
En el 2019, CIAP recibió G. 6.323.338.224 para realizar actividades tales como jornadas de boxeo, por G. 750 millones, mejoramiento de espacios públicos por G. 1.550 millones, construcción de puentes por G. 360 millones, asistencia médica entre otras cosas, sin mencionar en qué ciudades se realizaron.
De la misma forma genérica también la organización Plantemos Conciencia, informó sobre el uso de G. 2.119.403.080, con jornadas prevención de adicciones que costaron G. 125 millones, asistencia a la población vulnerable por G. 835 millones y transferencia a otras organizaciones por más de G. 3.000 millones, sin mencionar cuáles son.
Los ediles departamentales, insisten también en contar con una auditoría de los fondos transferidos a las mismas organizaciones en el 2020 de G. 13.391.331.209, donde CIAP recibió G 3.012.891.953 y Plantemos Conciencia G. 10.378.439.256.
Además solicitaron otros 4 informes concernientes al uso del dinero, entre ellos la celeridad en la fiscalización especial del uso de los fondos Covid, que como es sabido, la gobernación transfirió en febrero, G. 5.105.600.00 a la Fundación CIAP y la rendición contenía facturas falsificadas y de empresas que no existen, para luego presentar una rendición paralela con facturas de los meses de mayo y junio.
Tesorero y síndico cobraron cheques
El tesorero de la Fundación CIAP, Paulino Palacios y el síndico, Nicolás Álvarez Osorio, son los responsables de haber efectivizado los cheques de los G. 5.105 millones que transfirió la Gobernación de los fondos Covid. El primero cobró dos cheques y el segundo un cheque del Banco Nacional de Fomento.
Asimismo, el médico Hugo Cabrera del Consejo de Salud Departamental cobró el cheque de G. 1.276 millones. Cabe recordar que Hugo Javier González y CIAP presentaron facturas falsificadas en su informe.