El panorama que se traza con respecto a la elevada inflación para los próximos meses puede tener su efecto negativo en el crecimiento del producto interno bruto (PIB) del país, condicionando el consumo privado y las inversiones, según analistas.
Al respecto, desde la consultora Mentu resaltaron el hecho de que para el cierre del año la más reciente estimación del informe de política monetaria del Banco Central del Paraguay (BCP) proyecta que la variación del índice de precios al consumidor (IPC) se ubique en la cifra más alta en alrededor de una década.
“La suba reciente de los precios, en particular en lo que respecta a los de combustibles y alimentos, incrementó la base del cálculo para el dato de la inflación, que cerraría el 2021 en 6,7%, superior en 2,5 puntos porcentuales a la estimación de junio, limitando la capacidad de los hogares de adquirir bienes y servicios”, explica un análisis de la firma que está liderada por el economista Hugo Royg.
Adicionalmente, Mentu resalta que, teniendo en cuenta la recuperación incipiente de la economía y el proceso de normalización de la política monetaria del BCP, la situación de los precios tendría implicancias en el crecimiento económico, dado que limitaría el consumo y retrasaría las decisiones de inversión.
TRANSITORIO. Por su parte, Patricia Goto, economista de CPA Ferrere, coincidió en que la inflación elevada tiene su efecto sobre todo en lo que concierne al consumo de los hogares, debido a que las personas pierden poder adquisitivo sobre sus ingresos. No obstante, consideró que la suba de la canasta para el año que viene irá convergiendo hacia la meta del Banco Central del Paraguay, que es de 4% y con un rango de tolerancia de 2%, resaltando las decisiones de la banca matriz en materia de política monetaria. “Con esta suba sostenida de precios lo que pasa es que el salario o el ingreso de las personas empieza a perder un poco de poder adquisitivo. Finalmente eso tiene consecuencias negativas sobre el consumo de los hogares y a largo plazo también podría darse algo de impacto por el lado de las inversiones”, dijo.
Incertidumbre sobre escenario fiscal
Un punto sobre el cual analistas privados y el propio Banco Central del Paraguay (BCP) expresaron recientemente su preocupación es sobre el escenario fiscal que se puede plantear el año que viene, considerando los pedidos de aumentos salariales de varios sectores y las implicancias que esta situación tenga sobre los precios internos. Hugo Royg, economista de Mentu, consideró que en el contexto actual el control de la inflación se debe encarar principalmente por el lado del ajuste de la política fiscal, mientras que Patricia Goto, de CPA Ferrere, indicó que las subas salariales “claramente van a repercutir” en el nivel de precios y generar una presión adicional que motivará al BCP a endurecer todavía más las condiciones monetarias.