El fiscal Federico Delfino, que intervino en el hecho, considera que la joven, que es conocida con el alias de Bell Ibarra, es sospechosa del hecho punible de extorsión.
El procedimiento para su detención se realizó luego de la denuncia de un hombre que reveló a los uniformados que fue contactado por la ahora detenida a través de la red social Instagram. Luego, se hicieron amigos, entraron en confianza y habrían pasado a comunicarse utilizando la plataforma WhatsApp, donde intercambiaron fotos íntimas.
Sospechan que Ibarra amenazó a su víctima con publicar las fotos y se inició, presuntamente, una serie de chantajes.
El hombre afectado cedió, y de acuerdo a la denuncia, transfería G. 2 millones semanales a cambio de que no se publiquen las fotos.
El pago se hizo por varios meses y llegó a la suma de G. 80 millones, de acuerdo con los datos que manejan los agentes del Departamento de Antisecuestro que llevaron adelante la intervención.
El comisario Jorge Olmedo, uno de los expertos en estos casos, instó a los ciudadanos que son víctimas de este tipo de hechos a realizar la denuncia al *377.