La intención de renunciar a su banca, planteada el miércoles por el diputado colorado José María Ibáñez a sus colegas, tendría un nuevo giro.
Esto debido a que los colorados se mantienen reacios a aceptar dicha posibilidad, teniendo en cuenta que varios de ellos también enfrentan procesos judiciales.
Ante la oposición de sus colegas, otra opción que se maneja es que apenas asuma Mario Abdo Benítez como primer mandatario, le designe al diputado como embajador o agregado diplomático, para que de esta manera solicite permiso en la sede parlamentaria y no tenga que renunciar a su banca.
Esta versión surgió luego de la reunión que mantuvieron ayer varios legisladores con el presidente de la Cámara, el colorado Miguel Cuevas, pero esperarán la próxima semana para tomar cualquier decisión, según se informó.
De acuerdo con parlamentarios que estuvieron presentes en la reunión que se realizó el miércoles –ocasión en que Ibáñez dio a conocer su pretensión de renunciar y en la que solicitó a sus colegas le ayuden a tomar la decisión–, fue Tomás Rivas el que se mostró más molesto ante la propuesta y le solicitó “que aguante un poco más”, con referencia a la presión ciudadana y mediática que viene afrontando Ibáñez.
Rivas fue imputado por una situación similar a la de Ibáñez, ya que consiguió la contratación de personas como funcionarios de la Cámara Baja, pero que cumplían labores en dependencias particulares del legislador. Hasta la fecha, Rivas chicanea para evitar su desafuero para que el proceso pueda seguir.
Si Ibáñez renuncia a su banca debe quedar en su reemplazo Iván Ojeda, mientras que si solicita permiso quedaría el primer suplente, Luis Nano Galaverna, hijo del senador colorado Juan Carlos Galaverna.
EMBAJADOR. Ibáñez ya fue embajador en el 2005 ante el Reino de Bélgica, Ducado de Luxemburgo, Holanda y la Unión Europea, con sede en Bruselas, durante el gobierno de Nicanor Duarte Frutos.
Su nombramiento se concretó entonces en momentos en que el diputado tenía problemas familiares tras el divorcio de su primera esposa Rosana Cárdenas y ya mantenía una relación con su actual esposa Lorena Plabst, quien también fue acusada por la Fiscalía en la misma causa que el diputado.
CAUSA. Ibáñez fue acusado por expedición de certificados sobre méritos y servicios de contenido falso y cobro indebido de honorarios; Plabst fue acusada por estafa.
Los caseros Favio Gómez, Viviana Falcón y Éver Falcón; y la jefa de Gabinete, Liz Gutiérrez, fueron acusados por cobro indebido de honorarios, uso de certificados sobre méritos y servicios de contenido falso y frustración de la persecución penal.
El juez Julián López fue el que blanqueó al diputado y demás acusados, beneficiándolos con la suspensión condicional de procedimiento, en donde reconocieron el hecho y pagaron un resarcimiento.
Ibáñez y esposa donaron un generador eléctrico valuado en G. 117 millones al leprocomio Santa Isabel; los caseros y la funcionaria deben donar G. 5 millones cada uno al Comité de Ayuda a Enfermos del Mal de Hansen, en 12 cuotas.