Juan José Brull
ÑEEMBUCÚ
Con antorchas en las manos, el pueblo humaiteño, en solemne caminata, ofreció tributo a los defensores de la nación y participó en la inauguración de un sistema de iluminación total de las ruinas de Humaitá.
El acto se realizó en recordación de los héroes de la Patria y del Día del Ejército Paraguayo, a iniciativa de la Comisión Nacional de Conmemoración del Sesquicentenario de la Epopeya Nacional, la Municipalidad de Humaitá y el Comando del Ejército; al conmemorarse 150 años del avance de las tropas aliadas, uno de los más dramáticos momentos de la Guerra de la Triple Alianza.
Historia. La fortaleza de Humaitá fue un enclave casi inexpugnable, pues a raíz de la crítica situación, el mariscal Francisco Solano López dejó en Humaitá al grueso de su ejército y levantó su campamento, se retiró, pasando hacia el Chaco y estableciéndose en San Fernando.
Los aliados –con alrededor de 40.000 efectivos– fueron cercando el lugar sobre unos 3.000 paraguayos sitiados en Humaitá. El infernal asedio del enemigo destruyó gran parte del imponente templo de San Carlos Borromeo.
Patrimonio Cultural. En coincidencia con el natalicio del mariscal Francisco Solano López y el Día del Ejército Paraguayo, celebrado cada 24 de julio, se realizaron varios actos en la ciudad sureña, como el traslado del cenotafio del general José Eduvigis Díaz en cureña hasta la iglesia San Carlos de Borromeo, escoltado por la guardia de honor. Posteriormente, se realizó la retreta militar, frente a los restos del antiguo templo.
También hubo serenata a los héroes, con la presentación de la Banda del Ejército y el requintista Paredes; el izamiento del pabellón patrio, seguido del tedeum en el templo local, y desfiles militar y estudiantil, que dieron la nota colorida a la festividad.
El ministro Fernando Griffith entregó al municipio la resolución por la cual se declara bien de patrimonio cultural nacional, al sitio en el cual se encuentra la histórica fortaleza de Humaitá, que fue el templo de San Carlos Borromeo. “Tenemos que aclarar algo importante, Humaitá nunca cayó, y el Paraguay nunca se arrodilló”, refirió el ministro de la SNC. “Este bastión fue tomado porque se decidió cambiar de posición”.