Como cada año, los platos de tallarín, guiso de arroz, locro, ipokue de poroto y tortillas fueron servidos a los comensales gracias a los donativos de los devotos de San Cayé. Salud, paz, pan y trabajo son ‘‘las cuatro necesidades más urgentes del Paraguay’’, se le pide al santo’’, comenta Andrés Caballero Santa Cruz, coordinador de la gran comilona.
‘‘Nuestra comunidad hoy está llena de gozo, 25 años de evangelización. Mucha gente se fue, gente que hizo posible que este día de San Cayetano sea fiesta patronal del barrio Sajonia’’, dijo Caballero al rememorar más de dos décadas de voluntariado en la comunidad que empezó con la intención de cocineras de Sajonia de honrar al patrono del pan y del trabajo con las comidas tradicionales del Paraguay.
Junto con el altar de San Cayetano, montado sobre las calles Juan León Mallorquín y Testanova, este año los visitantes pudieron rezar a la reliquia de la Santa Cruz de Nuestro Señor Jesucristo.
Ayer, antes del karu guasu, los devotos rezaron el ángelus y cantaron el Himno Nacional pidiendo por la sanación espiritual del país. La jornada culminó con una merienda familiar.