En el arranque de este 2022 se enviaron 21.073 toneladas de carne bovina, -1,36% menos que el mismo periodo del 2021, pero con precios que superan a todos los registros de los últimos 8 años, según el informe mensual del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa).
El principal mercado es Chile, que participó en las compras en un 37%, le siguen Rusia y Taiwán con 15% de protagonismo cada uno, en tanto que en cuarto lugar está Israel con el 14% y el quinto, Brasil.
En total el complejo de carne bovina, teniendo en cuenta menudencias y despojos permitió al país un ingreso de divisas de USD 117,1 millones mediante comercializaciones ejecutada con 25 mercados.
De acuerdo al presidente del Senacsa, José Carlos Martin, el hecho de que la faena haya aumentado alrededor de 20.000 cabezas respecto a enero del año pasado y que contradictoriamente el volumen de las exportaciones haya disminuido, aunque ligeramente, indica que el mercado interno estuvo dinámico para el sector.
Cautela. El buen comportamiento del negocio de la carne se compara con la base del 2021, cuando se rompieron todos los récords tanto en volumen como en valores, cuyas cifras no se alcanzarían este año.
“Bastante auspicioso estuvo el arranque del año porque el volumen todavía se está manteniendo y los precios incluso muy por encima a los del año pasado, pero con un pronóstico mucho más reservado respecto al gran comportamiento que tuvo la carne paraguaya el año pasado porque va a ser difícil igualar y llegar a una faena de 2.200.000 cabezas como el año pasado va a ser muy difícil”, dijo el titular del servicio veterinario sobre las expectativas.
Los pronósticos se basan en una menor oferta de ganado terminado, teniendo en cuenta además que el censo de bovinos, que parte de la vacunación antiaftosa, apunta llegar a 13.600.000 animales, con una merma que supera las 300.000 cabezas.
Esto se debe factores climáticos y la faena de hembras, que implica una disminución en la disponibilidad de vientres necesarios para el periodo de reproducción.
El primer periodo de inmunización contra la aftosa empezó el lunes y se extenderá hasta el 11 de marzo, mientras que el registro va hasta el 25 del mismo mes. Al mismo tiempo se aplican las vacunas contra la brucelosis para las terneras.