“Si bien esperamos que los componentes de la demanda agregada (el consumo y la inversión) se reactiven, esto estará supeditado a tres grandes temas, el efecto climático sobre la producción agropecuaria, la posibilidad de un rebrote mayor de la pandemia que pueda imponer mayores restricciones nuevamente y una mayor dinámica en las economías vecinas”, señaló.
Con relación a cómo se dará el desempeño por sectores, Correa resaltó que el crecimiento en Paraguay es siempre asimétrico y que no todos los sectores tienen las mismas capacidades para capturar los momentos de auge de la economía. “Es por ello que tenemos todavía niveles altos de desigualdad, además nuestro mercado laboral tiene una dualidad muy marcada por lo formal e informal”, comentó el ex viceministro de Economía del Ministerio de Hacienda y ex titular del Banco Nacional de Fomento.
“Si miramos a los sectores que podrían ser dinámicos el año que viene, debemos enfocarnos en aquellos que hoy han recuperado sus capacidades instaladas, pero lo que preocupa es la alta informalidad. Un plan de reactivación no siempre impacta de manera directa a los sectores y empleos informales. No debemos esperar que las medidas permeen a estos esos sectores, debemos incluirlos con formalización, pero con incentivos correctos que hagan más fácil y barato transparentarse”, añadió.
protagonistas. Ante la pregunta de qué sectores liderarán el crecimiento del PIB el año entrante, señaló que la construcción (obras privadas y públicas) debería de ser el principal multiplicador de la actividad económica, considerando que además tiene impactos en la generación de empleos en las capas más bajas de ingresos. Agregó a la industria y a los servicios en general, pero puntualizó que la pandemia por Covid-19 dejó como resultado muchas empresas (mipymes e informales sobre todo) destruidas, con lo cual la recuperación se hace más complicada.
“Si la economía quiere reactivarse, el principal aspecto es la recuperación del consumo. Pero para que ello ocurra, las familias deben mejorar sus ingresos y esto se da solamente si hay empleo. No debemos olvidar que, de acuerdo a la Dirección General de Estadísticas, Encuestas y Censos (Dgeec), uno de cada cinco trabajadores no está generando ingresos o tiene menos ingresos que antes. Las personas han modificado sus hábitos de consumo, eso lleva tiempo. La pandemia también nos ha enseñado que debemos ser más previsores en el manejo de nuestro dinero. Esperemos no tener ninguna sorpresa de alguna crisis económica más profunda en nuestros vecinos, ya que esto tendrá efectos nefastos en el comercio de frontera y nuestras exportaciones no tradicionales”, expuso.
recuperación. Finalmente, Correa mostró optimismo respecto al futuro de una recuperación económica, que quizás nos lleve todo el 2021. “Sin embargo, mi preocupación está en tener un plan, una agenda de crecimiento. Está visto que de esta manera seguiremos teniendo crecimientos modestos. Esa agenda debe ser explícita en una reforma de nuestro sistema productivo. Encadenamientos productivos, un plan con incentivos correctos, una inversión inteligente en infraestructura, así como una reforma administrativa que haga del PGN un instrumento que mejore la calidad de vida”, manifestó.