Si algo necesita el Escobero es precisamente la actitud con la que salió a encarar la etapa complementaria, en la cual torció las circunstancias del juego totalmente a su favor en comparación a la primera etapa, en la que si bien abrió el marcador, terminó en desventaja en el marcador.
Pero, en el segundo acto, el equipo de Basualdo mejoró bastante en lo colectivo, tuvo mayor y mejor circulación de la pelota y por sobre todo una gran contundencia que le permitió dar vuelta el marcador en menos de 5 minutos con los tantos de Sosa y Santiago Salcedo, quien marcó su primer tanto en este 2019.
El Kelito sintió los goles y ya no pudo mantener la dinámica de la primera mitad. La ansiedad por el empate lo desconcentró, llevándolo a las imprecisiones y a quedar mal parado en defensa en algunos pasajes hasta que la pena máxima le dio la oportunidad de igualar el encuentro por intermedio de Silvio Torales, quien ejecutó al ángulo para cerrar un 3-3 espectacular.