El reporte de la cartera fiscal indica que el gasto social se incrementó en 14,4% con respecto al mismo periodo del 2022. Esto, a su vez, representa el 21% del presupuesto vigente previsto para este segmento.
La prioridad fiscal de los servicios sociales al mes de marzo fue del 56%, en coincidencia con los últimos cinco años, donde la ejecución se mantuvo en promedio en un 56%.
Según el informe, la variación se atribuye principalmente al incremento en la ejecución en los sectores de salud, seguridad social, educación y promoción y acción social.
La estructura del gasto social analizado se compuso principalmente en un 31% por recursos destinados al sector de educación; en segundo lugar está salud, con el 28%; mientras que promoción y acción social, así como seguridad social participan en un 20% y 17%, respectivamente.
Los principales desembolsos en el sector de educación se concentraron en los programas de educación elemental, que incluye principalmente servicios educativos en nivel inicial, primer y segundo ciclo de la EEB.
En tanto que en Salud, el 37% fue destinado a atención médica, que incluyen principalmente servicios hospitalarios en las regiones sanitarias para la reducción de la morbimortalidad, atención primaria de la salud y atención a enfermedades especiales, entre otros.