“En la medida en que la recaudación tributaria se recupere en línea con la reactivación económica gradual que se proyecta, no sería necesario utilizar estos recursos en gastos de funcionamiento del Estado. En la Ley de Emergencia se autorizó expresamente el pago de ciertos gastos de funcionamiento debido a la caída drástica en los ingresos tributarios de abril y mayo”, expresó.
Por otro lado, consideró que estos fondos se deben obtener a través de la emisión de bonos en guaraníes a largo plazo, para también empezar a reducir la dolarización de la deuda pública. Justificó esta sugerencia en el hecho de que la elevada denominación en dólares de la deuda pública constituye un riesgo financiero adicional para el Estado y en que es necesario promover una mayor profundización del mercado local de bonos del Tesoro en guaraníes.
“Hay suficientes fondos locales e incluso inversionistas internacionales van a empezar a invertir en bonos en guaraníes en la medida en que se incremente la liquidez del instrumento”, aseguró.
El analista instó a enfocarse también en las acciones de largo plazo que generen un funcionamiento más eficiente y sostenible del Estado, en coincidencia con los frecuentes reclamos provenientes de distintos sectores de la población en contra de la corrupción en la administración pública.
“Lo más importante y resaltable de este nuevo programa son las reformas estructurales planteadas, que ojalá tengan el apoyo mayoritario político y ciudadano. Estas reformas son fundamentales para mejorar el gasto y los servicios públicos en los próximos años”, concluyó.