“Hemos acordado extender la moratoria de deuda para los países más pobres durante seis meses”, anunció el ministro de Finanzas de Arabia Saudí, Mohamed al Yadan, que presidió la reunión, en una conferencia de prensa posterior al encuentro entre los ministros.
Al Yadan explicó que el grupo del G20 pactó esta medida debido a la “continua presión de liquidez” en esas naciones que “están lidiando con los desafíos sanitarios, sociales y económicos asociados a la pandemia del Covid-19”.
Este acuerdo será revisado en su reunión de la próxima Asamblea de Primavera del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), que se celebrará en abril.
La decisión de prolongar la suspensión tanto los reembolsos de capital como los pagos de intereses beneficia a todos los países de la Asociación Internacional de Fomento (AIF), el brazo de desarrollo internacional del BM, que actualmente están en servicio de la deuda con ambos organismos de crédito.
La moratoria del G20 entró en vigor el 1 de mayo y, hasta el acuerdo de ayer, estaba previsto que durase hasta final de año. Su objetivo es ayudar a los 73 países más pobres del mundo, aunque solo 42 se han acogido a esa medida. Los países del G20, las principales economías del mundo, son los principales prestatarios de las naciones con menos recursos y China destaca por ser el mayor acreedor. EFE