Gustavo Saba
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Sin mística, sin juego, sin goles, sin nada. Así quedó Olimpia anoche, al perder de local ante un humilde Delfín de Ecuador por 1-0, en una derrota que quedará marcada como una mancha negra en un club que tiene un romance único con la Libertadores, pero el Olimpia de Daniel Garnero nunca fue capaz de refrendar esa rica historia copera.
Lanzado al ataque desde el minuto uno, pero sin definición, el Franjeado se repitió una y otra y otra vez el mismo escenario: llegar hasta casi bajo el arco rival, pero no saber empujar el balón dentro del arco.
Todo era igual, y el rival empezaba a confiarse, darse cuenta de que podía meter un contragolpe o con una pelota para llevarse un premio de Para Uno.
El partido entró en la complementaria y no llegaba el gol, a los 62 minutos parecía que eso terminaba, pero la línea argentina Milone anuló el gol de Iván Torres por un desvío de Derlis González que parecía estar en offside. Un adelantamiento casi imperceptible para el ojo humano.
Luego Garnero mandó hombres para atacar a la cancha, pero siempre con el mismo guion, los desbordes con centros al área o pelotazos al área para que los delanteros puedan cabecear, algo que los ecuatorianos aprovecharon y se deleitaron despejando.
Lo peor estaba por llegar, el gol de Delfín, con Agustín Ale cabeceando en área decana sin marca alguna y la imagen que dejó Olimpia fue triste, tanto que hasta compañeros se chocaban entre sí, una eliminación que calará hondo.
8 años pasaron para que Olimpia quede último en un grupo de Libertadores (en la edición 2012 con7 puntos).
Garnero tiene fuerza para seguir Daniel Garnero, entrenador de Olimpia, confirmó que quiere seguir en el cargo, pero advirtió que tendrá varias charlas. Consultado sobre el fracaso expresó: “La palabra fracaso no la entiendo demasiado, como competidores nos preparamos para eso, si logramos el objetivo nos vamos contentos y si no, se vuelve a pensar y se prepara para el resto, soy un competidor y pienso en eso”.
Santos agónico En Brasil, Santos venció 2-1 a Defensa y Justicia de Argentina. El gol rondó los arcos con sus ansias de concreción en todo el partido. Defensa lo buscó y lo consiguió a los 52 minutos con atropellada de Braian Romero. El local tuvo de sobra ocasiones para igualar, así como la visita para aumentar. A los 78’ Lucas Braga puso el 1-1 y a los 92’ Leonardo clavó el 2-1 y le aplicó una puñalada en el corazón a Defensa, que quedó fuera de la Libertadores.