Alrededor de las 14.00, los fiscales Martín Cabrera y Josefina Aghemo presentaron acusación contra el ex rector de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), Froilán Peralta, por hechos de corrupción cometidos en la casa de estudios que motivaron la rebelión de los estudiantes, quienes se identificaron con el lema #UNAnotecalles, en setiembre de 2015. Exigieron la renuncia de Froilán, quien quedó luego recluido en el penal de Tacumbú.
El Ministerio Público acusó al ex titular de la mayor casa de estudios del país por lesión de confianza, cuya expectativa de pena es hasta cinco años de prisión, e inducción a un subordinado a un hecho punible, en este caso cobro indebido de honorarios, que se castiga hasta con 2 años de cárcel.
Se pidió elevar la causa a juicio oral y público, en la que está involucrada a la ex secretaria privada de Peralta, Tatiana Cogliolo, quien cobraba más de G. 12 millones como docente de Veterinaria en dos cátedras, cuando en realidad era parvularia. Además de ellos, otras 45 personas son acusadas.
Este diario, a través de investigaciones periodísticas, evidenció los hechos de corrupción cometidos en el Rectorado de la UNA, especialmente en la contratación, asignación de rubros, funciones y cobros irregulares por parte de varios funcionarios públicos que figuran en las planillas de la mencionada institución.
La acusación refiere que Peralta nombró a la madre de Tatiana, Gladys Ester Cogliolo Izquierdo, a su prima Evelyn Caballero Izquierdo y su hermana Chiara Jorgelina Caballero, estudiante del nivel medio en el Colegio Nacional de Lambaré, todas ellas contratadas como docentes de la UNA sin que las mismas cuenten con el perfil académico requerido para el cargo.
allanamiento. Además, los fiscales allanaron el Rectorado y otras facultades e incautaron documentaciones en las que se pudo determinar la existencia de las irregularidades. Es decir, los funcionarios cobraron sus haberes sin prestar realmente servicios.
En tanto, el concejal municipal de Lambaré, Lorenzo Mendieta Caballero, fue acusado aparte de cobro indebido por producción de documentos no auténticos, debido a que ordenó, al director de Recursos Humanos de la Municipalidad de Lambaré, Mauro Palacios, la confección de las notas de remisión de las planillas de asistencias de los funcionarios comisionados.
Con relación a la ex jefa del Departamento de Talento Humano del Rectorado, María del Carmen Martínez Méndez, nombrada como la comepapeles, por destruir documentos comprometedores al tragarlos fue acusada por apropiación. Además fue acusada por estafa por cobrar G. 242.651.346, que correspondía a dos funcionarios nombrados en la UNA, obteniendo así un beneficio patrimonial indebido.
El ex decano de Veterinaria, Juan Gualberto Caballero, imputado por lesión de confianza, fue beneficiado con la suspensión condicional de procedimiento, porque aceptó el hecho al igual que Erika Patiño. En tanto, María José Orué y Aidée Medina fueron sobreseídas.
Tras las presentación de acusaciones el juez deberá fijar audiencia preliminar para los implicados.