“Estoy feliz de ver a Lula libre otra vez”, exclamó Fernández en su discurso inaugural, junto a la ex presidenta brasileña Dilma Rousseff. “Siempre es necesario estar al lado de los que sufren alguna injusticia”, enfatizó Fernández y recordó su visita en prisión durante su campaña electoral al dirigente, a quien considera un perseguido político.
“Este va a ser el grupo del que salgan los líderes que van a poner de nuevo en pie a América Latina. Vamos a cambiar a América Latina”, afirmó. En un tono similar, Rousseff sostuvo: “Para nosotros todos en América Latina la victoria de Alberto Fernández cambia las condiciones y revierte la onda (ola) conservadora”. Rousseff se dijo además feliz por la puesta en libertad de Lula porque pudiendo andar libremente por Brasil puede hacer que vuelva la democracia y la paz.
Fernández tuvo tensos roces con Jair Bolsonaro, quien llamó a los argentinos a votar a favor del actual gobernante Mauricio Macri, y anunció que no acudirá a su ceremonia de investidura. AFP