Con un financiamiento sostenible, el desarrollo profesional del educador y fortaleciendo la educación técnica y el enfoque de derechos, miembros de la organización Familias por la Educación Integral en Paraguay (Feipar) buscan que se instale el debate por la reforma educativa en las instituciones escolares.
Sostienen que hay demasiados mitos y temores que deben aclararse en el marco del proyecto del Plan Nacional de Transformación Educativa (PNTE).
Pero es imperante reformar la educación, mirando también en mejorar la gestión del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), sostiene Paola Vaccotti, experta en Políticas Públicas y presidenta de Feipar. La organización forma parte de las mesas establecidas para el PNTE y también trabajó en el Plan Nacional de Niñez y Adolescencia.
“Necesitamos plantear un consenso social para que se efectivice la reforma como política pública y esto debe estar en una ley o un decreto para luego asignar presupuesto”.
PARTICIPACIÓN ACTIVA. Para que una reforma o transformación sea efectiva debe fortalecerse igualmente el rol de las familias en la educación.
“Fortalecer la comunidad educativa no tiene que ver solamente con el espacio educativo o con el aula o las calificaciones. La familia y toda la sociedad tienen que estar al tanto de todo lo que pasa en la escuela”, agrega.
Indica que este refuerzo familiar implica conocer debilidades estructurales, a los docentes, normativas y disposiciones vigentes que giran en torno a los establecimientos escolares.
Vaccotti expresa que esto también es fortalecer la patria potestad y no instalar que el Estado esté por encima. Pero, aclara, los niños y adolescentes son sujetos de derecho.
“Ahí radica la diferencia principal con los otros grupos, que piensan que los chicos y chicas no son sujetos de derecho; nosotros creemos que sí, por eso deben darse políticas públicas efectivas hacia ellos como una educación de calidad”, remarca la experta.
Sumando al enfoque de derechos, cualquier transformación debe tener enfoques de interculturalidad y de inclusión, atendiendo a las altas cifras de exclusión educativa a nivel país.
De acuerdo con el MEC, más de 240.000 niños, niñas y adolescentes de 5 a 17 años se encuentran fuera del sistema.
CRÍTICAS. La supuesta inclusión de la ideología de género es la principal crítica de representantes de familias de otros sectores.
“Expliqué que uno de los mecanismos para la introducción de la ideología de género es la transformación del lenguaje, es decir, a través del cambio del significado de las palabras”, indica el experto y pastor Miguel Ortigoza.
Refiere que muchos sectores mantienen malestar en el proyecto para transformar la educación. “Colocan a la sociedad por delante de la familia”.
Necesitamos plantear un consenso social para que se efectivice la reforma educativa y elevar así la calidad.
La familia y toda la sociedad tienen que estar al tanto de todo lo que pasa en la escuela. No implica perder la patria potestad.
Paola Vaccotti,
titular de Feipar.
PUNTOS PLANTEADOS EN EL PNTE
Fortalecer a la comunidad educativa.
Plantear una educación bilingüe de calidad.
Mejorar la gestión del MEC.
Foco en la educación técnica y profesional.
Financiamiento educativo sostenible.
Apropiación de las tecnologías en la educación.
249.000
alumnos y alumnas fuera del sistema escolar.
45%
de instituciones educativas en mal estado.
47 de cada 10
niños presentan más pérdidas de aprendizaje tras pandemia.
Fuentes: