De hecho, los responsables de las obras del futuro puente ofrecieron hace poco más de una semana un recorrido por la obra. Entonces, el ingeniero Fernando Antona, uno de los encargados del proyecto, informó que la construcción está con más del 90% de avance y que se prevé la culminación de la conexión vial en dos meses y medio.
El profesional añadió que el tránsito por la zona será a mediados del segundo semestre. Sin embargo, las obras complementarias continuarán por dos años más. Antona también recordó que siguen pendientes los pagos por la obra por parte MOPC, pero que las empresas contratistas asumieron el compromiso de continuar, a pesar de esta dificultad financiera.
A su turno, la Secretaría de Estado resaltó que es la primera vez que empresas locales, con el asesoramiento de expertos internacionales en el rubro, llevan adelante un emprendimiento de tales proporciones. “Los trabajos prosiguen sin interrupciones en sus diferentes frentes. Además del puente atirantado de más de 603 metros sobre el río Paraguay, también se construyen accesos y viaductos, totalizando más 7 km vías desde la Costanera Norte hasta la ruta Remanso-Falcón, en Chaco’i”, detalló el MOPC.
La inversión requerida para el proyecto es de G. 902.000 millones. El puente atirantado estará compuesto de 23 tirantes, y ya fueron puestos cerca de la veintena. Para la construcción se utilizan 100.000 m³ de hormigón armado, unas 10.700 toneladas de acero y unas 590 unidades de vigas pretensadas.