La abogada Teresa Flecha visitó nuestra redacción para explicar la historia.
Francisco Feliciano Duarte (Manito), ex director de la Antelco en época de Stroessner, vendió su propiedad en 1989 a Humberto Zapatini. Este, a su vez, a Higinio Benítez y este a HB Inmobiliaria SA. El inmueble está ubicado en Minga Guazú, Alto Paraná.
Manito falleció en el 2000. Sin embargo, Enrique Sarubbi Flores, que es su yerno, promovió un juicio de cumplimiento de contrato y obligación de hacer escritura pública ante el juez Saifilding. Este juez dio la orden de hacer la transferencia el 17 de julio del 2014 por sentencia número 259, informó Flecha.
“La sentencia es totalmente nula, porque la acción fue promovida por Sarubbi en el 2013 contra Manito Duarte, que falleció en el 2000. El juez corrió traslado al muerto y este, al no contestar, fue declarado rebelde. Quien dictó la sentencia haciendo lugar a semejante aberración jurídica hoy pretende ser ministro de la Corte”, expresó.
La abogada siguió diciendo que “con el título falso que Sarubbi consiguió, promovió un interdicto de recobrar la posesión de un inmueble y con ello obtuvo una orden de desalojo contra los verdaderos propietarios y poseedores de la finca. Sarubbi nunca tuvo la posesión. Sin embargo, la jueza Máxima Meza, de Ciudad del Este, concedió la orden violando el Código Procesal Civil para interdictos”, agregó.
“En consecuencia, el 7 de enero último, la Inmobiliaria HB SA fue víctima de una violación de domicilio, en una de sus fincas ubicada en el kilómetro 22 de Minga Guasu, por parte de Enrique Sarubbi Flores, quien se apersonó hasta el inmueble acompañado por varias personas y una patrullera con efectivos policiales de este distrito. Inclusive, la orden que llevó la Policía decía km 20, pero igual el desalojo se produjo en el km 22”, indicó.
Expresó que “la viuda de Manito Duarte se allanó a la demanda y recibió notificación sabiendo que su marido estaba muerto. Es cómplice”, señaló.