El actor francés Jean-Paul Belmondo falleció ayer a los 88 años. La muerte fue anunciada por su abogado, Michel Godest. “Estaba muy cansado desde hacía algún tiempo. Se apagó tranquilamente”, manifestó a la AFP. El intérprete se encontraba en su domicilio en París. Con su partida, Francia pierde a una de las últimas grandes estrellas populares y una de sus figuras más consagradas del cine, con una filmografía de más de 80 filmes.
Belmondo llegó al cine de la mano de Jean-Luc Godard, director de la nouvelle vague, a cuyas órdenes daría vida a un cautivador delincuente en À bout de soufflé (Sin aliento), de 1960. “Venga a mi habitación, haremos una película y le daré 50.000 francos”, le había manifestado el cineasta al actor, con quien se había cruzado en la calle y que tenía menos de 30 años en aquel entonces.
Jean-Paul colaboró con los más reconocidos directores de la época, como Vittorio de Sica, François Truffaut, Claude Chabrol, Alain Resnais, Claude Lelouch, entre otros. L’homme de Rio (El hombre de río), de 1964, Le Professionnel (El profesional), de 1981, y L’as des as (As de ases) de 1982, son algunas de las cintas que componen su filmografía.
CELEBRIDAD. Ante la muerte de la estrella, la repercusión no se hizo esperar. “Estoy completamente devastado. Voy a intentar aguantar para no hacer lo mismo en cinco horas… No estaría mal que nos fuéramos los dos juntos. Es una parte de mi vida, empezamos juntos hace 60 años”, expresó el actor Alain Delon, de 85 años, a la cadena CNews. Por su parte, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, se refirió al intérprete como un “tesoro nacional”, “una leyenda francesa”.
