El mismo estaba procesado porque supuestamente se quedó con 2 mil millones de guaraníes, que cobró a varios efectivos policiales para “mejorar la calidad de la alimentación que recibían”.
Por voto de los jueces Hécto Capurro y Juan Carlos Zárate, y la disidencia de Gustavo Santander, se dispuso la extinción de la causa iniciada en el 2009 por el entonces fiscal Arnaldo Giuzzio. Además, decretaron el sobreseimiento del encausado Jara Adorno.
El fiscal Luis Piñanez dijo que iba a apelar el fallo, debido a que no correspondía la extinción, ya que el caso estuvo 8 meses en la Sala Constitucional de la Corte, plazo que no fue tenido en cuenta por los jueces, según explicó.
El pedido de extinción fue hecho por el abogado defensor Osvaldo Bittar, que argumentó que pasó el plazo de 4 años para que el mismo tuviera una sentencia por lo menos de primera instancia, según afirmó.