Esta semana, el titular del Ministerio de Relaciones Exteriores, embajador Julio César Arriola, enfatizó que el ámbito de aplicación del plan será un tramo de jurisdicción nacional de 542 km del río Paraguay, desde su confluencia con el río Apa hasta su confluencia con el río Pilcomayo, y que no se cederán competencias, considerando que se pretende una cooperación bilateral con el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos (Usace por sus siglas en inglés).
Al respecto, Canese dijo que no se oponen al plan, pero que este debe considerar todas las aristas, y recordó que la intención de incorporar la colaboración del Usace data ya del 2015. “La preocupación en el caso del Usace es que además es una entidad militar, y sabemos cómo EEUU tiene sus proyectos geopolíticos vinculados con el extractivismo, con el modelo de dependencia”, alertó la ex viceministra.
Añadió que EEUU “nunca” apoyó un proyecto para que nuestro país pueda mejorar su nivel de desarrollo tecnológico o industrial, “sino más bien para que dependamos más de ellos”. Además, dijo que si se trata de un ámbito bajo jurisdicción militar, Paraguay debe preguntarse sobre el interés geopolítico del país norteamericano.
Antecedentes. Al mismo tiempo, la ingeniera relató que la intervención del río para mejorar la navegabilidad es un tema que vienen siguiendo desde hace décadas, y enfatizó que los ambientalistas –en general–, conociendo la experiencia de otros países, advierten de los riesgos de modificar el río Paraguay. “Es un río más nuevo que el Paraná, un río de llanuras, cuya conformación hace que la circulación del agua no sea tan rápida en momentos de bajante. Hay efectivamente pasos difíciles para la navegación, pero modificar o simplificar los pasos hará que la poca agua corra más rápido, lo cual es riesgoso”, avisó.
Recordó que hubo por ejemplo proyectos que pretendían alterar tramos curvados para convertirlos en línea recta, que hubieran aumentado la velocidad del agua, pero también la bajante y la erosión de los márgenes. “Los peces también necesitan una velocidad específica del agua para desovar y reproducirse, y hoy ya se está socavando el río, con embarcaciones que no son adecuadas, porque no hay suficiente control de las autoridades ambientales. Otra práctica nociva es utilizar árboles como amarre, que no cumplen esa función, eso también erosiona el río. Los proyectos se hacen sin consultar a los pescadores, a los pobladores que viven del río”, lamentó Canese.
El canciller Julio César Arriola dijo que el Plan Maestro no implica ceder soberanía en la vía navegable, pero la ingeniera Mercedes Canese señaló que el Usace y su participación generan suspicacias.
20
millones de dólares es lo que pretende invertir Paraguay para la elaboración del Plan Maestro para la hidrovía.
80%
de las exportaciones paraguayas transitan por el río, y 70% de las importaciones ingresan por la hidrovía.