AP
La Paz
El presidente Evo Morales calificó como una ''pelea entre hermanos’’ la disputa entre dos provincias en torno a un rico campo de hidrocarburos y exhortó a que el conflicto se resuelva ''debatiendo, (y) analizando’’, después de que el lunes se manifestara que la solución podría ser política y no jurídica.
El mandatario formuló sus declaraciones como prólogo a las sesiones de acercamiento que las partes comenzaron ayer en La Paz, y a las que invitó el vicepresidente, Álvaro García.
''Tengo mucha confianza, mucha esperanza de que esta pelea entre hermanos de dos provincias, O’Connor y Gran Chaco, se resuelva debatiendo, analizando’’, indicó Morales.
''Yo me animaría a decir que no es una cuestión jurídica, es una cuestión política, que nuestros alcaldes y dirigentes provinciales se pongan de acuerdo en cómo se pueden aprovechar muy bien’’ los recursos procedentes de la explotación de campo Margarita, rico en gas, que ambas partes reclaman como propio, indicó Morales antes.
García, al inaugurar la reunión, dijo que se trata de ''buscar, en términos de la concertación (...), la posibilidad de un acuerdo en torno a un problema limítrofe que ha puesto en tensión al departamento (de Tarija) y al país’’.
Poco antes de ingresar al encuentro, el presidente del Comité Cívico de O’Connor, Domingo Moreno, protagonizó amagos de pugilato con el diputado Willman Cardozo, quien insiste en que Margarita pertenece a Gran Chaco. ''Hay mucha gente que me amenaza’’, dijo Cardozo, uno de los organizadores de las protestas en su región.
García, al señalar que Morales y él están ''profundamente entristecidos con lo que ha sucedido’’, sostuvo que se trata de diseñar una alternativa de solución para presentarla a la Prefectura (Gobernación) de Potosí, que ahora hace legalmente de juez en el caso, al haberse recusado a la de Tarija, al que pertenecen las provincias enemistadas.
El conflicto, la semana pasada, cobró una vida y dejó decenas de heridos en enfrentamientos en Gran Chaco entre el ejército y lugareños que tomaron una estación de bombeo del gasoducto a Argentina, Pocitos, y atacaron a otra, lo que obligó a reducir las exportaciones a ese país y Brasil.
Pocitos fue retomada por el ejército y los envíos se normalizaron el fin de semana, pero Morales denunció que por los ataques de pobladores del Gran Chaco, en los municipios de Yacuiba (770 kilómetros al sureste de La Paz) y Villamontes (680), el Estado perdió dos millones de dólares.
El gasoducto es administrado por la empresa Transredes, controlada por la anglo-holandesa Shell y la también británica Ashmore.
Gobernador de Tarija acusa al Ejecutivo
A la reunión de acercamiento entre Gran Chaco y O’Connor asiste Mario Cossío, prefecto (gobernador) de Tarija, departamento (estado) al que pertenecen las provincias en conflicto. Cossío se encontraba el viernes en la zona de los enfrentamientos, lo que obligó a posponer para el lunes el inicio de las conversaciones. Gran Chaco, que no aceptaba el diálogo, también envió representantes.
Cossío denunció que el Gobierno inició una campaña en los medios y con el despliegue de funcionarios en el país con el mensaje de que el prefecto era el responsable de la violencia. En respuesta, denunció que fue el Gobierno el que no atendió el asunto oportunamente, para debilitarlo, ''por el sólo delito’’ de no ser oficialista.