La investigación a fondo del uso de la Terminal de Ómnibus de Asunción por parte de empresas que, a pesar de tener unidades en mal estado, siguen operando merced a órdenes judiciales fue prometida ayer por la intendenta, Evanhy de Gallegos.
La misma se refirió al caso que afectó a Óscar Sosa Quintana, quien el pasado miércoles 24 pagó pasajes para sus suegros para utilizar un colectivo de dos pisos con aire acondicionado de la empresa Rápido Caaguazú, pero se encontró con un vehículo de los considerados chatarra.
La sorpresa del mismo fue que en la misma administración de la estación de buses le señalaron que esa firma no tenía licencia, pero que seguía operando amparado por el fallo de un juzgado.
Tanto el administrador de la Terminal, Nelson Galván, como las autoridades de la Dirección Nacional de Transporte (Dinatrán), entre ellos el jefe de Gabinete, Osvaldo Leiva, señalaron que no podían oponerse a una resolución judicial.
Ante el estado de indefensión de los usuarios en el caso de accidentes o pérdida de las pertenencias de los pasajeros, la titular del Municipio capitalino manifestó que se constituirá mañana en el lugar para ver qué acciones específicas se pueden tomar para regularizar esta situación.
El asesor jurídico de la Dinatrán, José Agüero, hasta el momento no dio a conocer la lista de jueces y juzgados que otorgan estas medidas.