Nos encanta la Navidad, ¿verdad? nos reunimos con familiares y amigos, compartimos regalos, buena comida y muchas celebraciones llenas de alegría y felicidad. Saludamos a conocidos y extraños con un ¡Feliz Navidad!
No importa la cultura ni el lugar, el espíritu navideño se apoya en la repetición de algunas tradiciones de celebración que nos unen a nuestra herencia para crear un ambiente festivo y emotivo que transmite la alegría y la buena voluntad de las personas entre sí. Tradiciones que pueden incluir mandar mensajes con buenos deseos, el cómo se arma el pesebre y los adornos de navidad, preparar viejas recetas familiares y entregarnos regalos. Se despiertan los deseos de reunirse y de asistir a los más necesitados.
Además de ser una época festiva, también se ve como un periodo para reflexionar sobre nuestra vida, y a veces nos conduce a sentir las ausencias, la tristeza o la soledad con más intensidad.
Pero este es un año especial, es un año para detenerse y echar una mirada a estos meses trascurridos en los que vivimos en medio de estrictas restricciones que nos impidieron llevar una vida normal, muchos enfrentaron innumerables dificultades para poder seguir adelante. Pérdidas de trabajo, negocios destruidos, enfermos que no podían seguir tratamientos, escuelas inactivas, trámites que no se pueden hacer, familias enlutadas, personas encerradas en espacios muy pequeños, autoridades que no están a la altura de las circunstancias, muchos sacrificios, y una permanente incertidumbre. Y acá estamos porque a pesar de todo salimos adelante, y en esa mirada retrospectiva vemos que fue en gran medida gracias a algunas personas que nos apoyaron de manera especial.
¿Verdad que enseguida te vienen a la mente algunas personas que te ayudaron, con su trabajo, con sus cuidados, con su apoyo emocional, aliviándote de alguna u otra manera este año difícil y angustiante?
El Covid nos impide tener la Navidad de siempre, muchos abrazos quedarán postergados, las mesas serán más pequeñas, las visitas a la iglesia serán limitadas y también el aturdimiento de las compras de regalos y sucesión de brindis, pero nos da la oportunidad de retomar ese espíritu profundo de la navidad, identifiquemos a estas personas que fueron especiales y que sepan que valoramos su apoyo diciéndoles GRACIAS.
¿A quiénes pondrías en tu lista?