Las autoridades chinas afrontan el mayor movimiento de protesta desde las manifestaciones prodemocracia de 1989, que fueron reprimidas brutalmente.
En este contexto de tensión, Pekín espera la visita del presidente del Consejo Europeo Charles Michel, que tiene previsto reunirse hoy con el presidente chino Xi Jinping.
Mientras tanto, el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, criticó la represión desplegada en el gigante asiático, que según él no es “un signo de fortaleza” sino de “debilidad”.
El máximo organismo de seguridad de China pidió el martes “medidas enérgicas” tras varios días de protestas en las principales ciudades del país contra casi tres años de estrictos confinamientos por el covid-19.
Este fin de semana estallaron manifestaciones en la capital, Pekín, y otras ciudades como Shanghái y Wuhan.
Pese a que las autoridades estrecharon el cerco para impedir nuevas concentraciones, se registraron la noche del martes choques entre manifestantes y la policía en Cantón, según testigos y videos publicados en las redes sociales y autentificados por AFP. Las imágenes muestran a agentes de policía vestidos con trajes blancos de protección integral y equipados con escudos antidisturbios, avanzando en filas por una calle del distrito de Haizhu.
En los videos se escuchan gritos, mientras se derriban barricadas naranjas y azules.
Las imágenes dan cuenta además de la detención de una decena de hombres que eran llevados con las manos esposadas.