Egipto realizó ayer una intensa actividad diplomática para tratar de consolidar el alto el fuego entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamas, particularmente con una visita a El Cairo del jefe de la diplomacia israelí, la primera de este tipo en 13 años.
Al mismo tiempo, el jefe de los servicios de inteligencia egipcios, Abbas Kamel, se entrevistó en Jerusalén con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y en Ramala (Cisjordania ocupada) con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas. Con el primer ministro israelí, las discusiones versaron principalmente sobre la intensificación de la cooperación entre ambos países vecinos, según un comunicado de la oficina de Netanyahu.
Netanyahu se refirió a la cuestión de los israelíes detenidos en Gaza, que es la principal demanda de una futura negociación con Hamás, así como a los medios para impedir que el movimiento islamista use los recursos asignados a la población para la reconstrucción de la Franja de Gaza, según la misma fuente.
En Ramala, Kamel discutió con Mahmud Abas sobre el apaciguamiento global en Jerusalén, en Cisjordania y en Gaza, sobre la reconstrucción del enclave –fronterizo con Egipto– y sobre el diálogo palestino entre los movimientos Fatah y Hamas, según la agencia oficial palestina Wafa.
Negociado por Egipto, país vinculado desde 1979 por un tratado de paz con Israel y mediador tradicional entre palestinos e israelíes, el 21 de mayo se instauró un cese del fuego tras una nueva guerra devastadora entre Israel y Hamás. Del 10 al 21 de mayo, 254 palestinos murieron en ataques israelíes en la Franja de Gaza, entre ellos 66 niños y combatientes, según las autoridades locales. En Israel, los cohetes lanzados desde Gaza causaron la muerte de 12 personas, incluyendo la de un niño, una adolescente y un soldado, de acuerdo con la policía. También se espera que el líder de Hamas, Ismail Haniyeh, visite Egipto, según una fuente de seguridad egipcia.
En el Cairo, el ministro de Exteriores israelí, Gabi Ashkenazi, mantuvo conversaciones con su homólogo egipcio, Sameh Shoukry, con el objetivo de reavivar el camino de la paz y reforzar el alto el fuego en Gaza, según la cancillería egipcia. En el encuentro se trataron las posibilidades de facilitar rápidamente la reconstrucción en la Franja de Gaza y Shoukry subrayó la necesidad de tener en cuenta la sensibilidad particular [que revisten] Jerusalén Este, la mezquita Al Aqsa y todos los lugares santos musulmanes y cristianos, indicó el Ministerio egipcio.