La Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP) inhabilitó a la empresa Engineering Saeca por doce meses para contratar con el Estado mediante un sumario, debido a que incumplió con el contrato para el montaje de la polémica pasarela de ñandutí que une el parque Ñu Guasu y el Comité Olímpico Paraguayo, además de operar de mala fe, según la Resolución Nº 4396/21, firmada por Pablo Seitz, director de Contrataciones.
La DNCP concluyó el sumario a la empresa Engineering Saeca en relación con la licitación adjudicada por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) para el montaje de un paso peatonal entre el Parque Ñu Guasu y el Comité Olímpico Paraguayo, cuya construcción generó un escándalo por la onerosa suma de USD 2 millones, y ahora fue suspendida por incumplir varios aspectos del proceso de contrataciones.
En su resolución, la DNCP señala que la contratista suscribió la adenda N° 1 en contravención de la ley 2051/03 (de Contrataciones Públicas) y de las bases del contrato, además de faltar en el plazo de ejecución de la obra e incumplir con la instalación eléctrica estipulada.
La firma contratista, según Contrataciones Públicas, también incumplió en la vigencia de la garantía del anticipo y en la vigencia del seguro de la obra, a lo que se suma otra inconducta como la “mala fe” al suscribir el convenio modificatorio N° 2 en condiciones ventajosas.
Por estos motivos expuestos, la DNCP inhabilitó a Engineering Saeca por un año para contratar con el Estado, declarando su conducta subsumida en los incisos b y c del artículo 72 de la ley de Contrataciones Públicas.
Estos puntos se refieren a que las empresas que incumplan sus obligaciones contractuales causando perjuicios al Estado, proporcionando información falsa o actuando de mala fe en el procedimiento de contratación, serán suspendidas por Contrataciones Públicas, en un plazo que puede ir desde tres meses hasta tres años.
BENEFICIADA. Engineering Saeca, propiedad de Juan Andrés Campos Cervera, es conocida popularmente como la superproveedora del Estado, debido a las numerosas contrataciones que logró con el Gobierno.
Incluso, algunos la califican como la empresa “mimada” del actual gobierno de Mario Abdo Benítez, ya que su cuñado habría influenciado en el MOPC para favorecer en la adjudicación de la pasarela de ñandutí.
Denunciada por la Contraloría
La Contraloría General de la República concluyó en su auditoría que la polémica pasarela de ñandutí tuvo un sobrecosto injustificado de G. 3.142 millones, según reveló en un informe de setiembre pasado.
Inicialmente, la obra se adjudicó por G. 12.437 millones, pero tuvo un incremento de hasta G. 14.121 millones, para lo cual no se fijaron especificaciones técnicas al respecto. Así, la suma sobrefacturada ascendió a G. 3.142 millones según el ente contralor. La Contraloría halló que gran parte de la suba realizada sería para beneficio de Engineering, donde solo un 3,6% correspondía a los costos directos de la obra.