Estudiantes de la carrera de Ingeniería Civil de la Universidad Nacional de Concepción se manifestaron ayer reclamando la libertad de su compañero Gastón González, quien se halla en prisión tras haber sido procesado por perturbación pública en el marco de la manifestación de ciudadanos indignados contra la administración del intendente Alejandro Urbieta.
El joven universitario fue imputado junto con otra manifestante, Rosa Benítez (con discapacidad), por la fiscala Leticia Del Puerto. La detención se dio en una estación de servicios del barrio Villa Armando, a cuyo baño ingresaron varios jóvenes al ser perseguidos por los cascos azules tras una movilización ciudadana frente a la casa de la presidenta de la Junta Municipal, Sisinia Silva.
La jueza de Garantías Hilda Benítez le dio prisión preventiva y los abogados apelaron la resolución, por lo que el caso está en manos del Tribunal de Apelación. “Venimos a pedirles a los miembros del tribunal que hagan justicia, porque nuestro compañero es una persona ejemplar y por el hecho de que haya manifestado sus reclamos, no hay motivos para tenerlo en la cárcel”, señaló Alma Lugo, compañera de estudios de González.
PADRE. Por su parte, Mario González, padre de Gastón, señaló que no está arrepentido de que su hijo esté privado de su libertad, porque así quienes lo arrestaron sabrán que el joven no es un patotero. “Mi hijo siempre dijo que su abuelo peleó contra los bolivianos y que por eso él decidió salir a las calles a manifestarse contra los corruptos”, dijo el padre.
Asimismo, espera que su hijo no pierda su semestre y destacó que aun estando en el penal de Concepción sigue estudiando sus materias con apoyo de sus compañeros.
Según Pablo Desvars, abogado de los procesados, lamentablemente hay fiscales y jueces que responden directamente al clan Urbieta, aunque manifestó su confianza en los miembros del Tribunal de Apelación, mientras se cumplen 47 días de la movilización que exige la renuncia de Alejandro Urbieta.