23 ene. 2025

El tema de tierras volvió a encender el debate en el Senado

Una denuncia del cartista Enrique Riera sobre una propiedad en litigio, usada como lugar de concentración política, volvió a encender el debate en el Senado, evidenciando las posturas respecto a la problemática de la tierra.

En medio de un ida y vuelta de reclamos y acusaciones, se propuso el tratamiento de la derogación de la Ley Riera–Zavala que criminaliza las invasiones, pero no prosperó por falta de votos.

Algunos senadores optaron por desconectarse de la sesión virtual, y otros, que estaban presentes, desaparecieron en señal de rechazo.

Riera se molestó por unas declaraciones en su contra por parte del presidenciable opositor Efraín Alegre, y le retrucó denunciando que sus candidatos utilizaron una propiedad en litigio para hacer una concentración política.

“Ahora entendemos por qué se hace una declaración alegre, respondiendo al nombre. Una reunión en el propio terreno invadido. Eso es atropello a la propiedad privada”, acusó.

El liberal Amado Florentín sostuvo que la intención del cartista era hacer quedar como invasora a toda la Concertación, que está haciendo frente al oficialismo en el poder.

“Conozco la situación comunal, y puedo decir que el senador Riera miente asquerosamente”, sostuvo, ofuscado, Pedro Santa Cruz.

“Todo esto estuvo manejado, el otorgamiento de títulos, por el Clan Fretes. El delincuente del doctor (Antonio) Fretes. La misma gente relacionada con este clan se está apropiando del Lago Ypoá”, sentenció el senador.

Jorge Querey, del Frente Guasu, dio registros sobre los casos judicializados y sostuvo que no se trata de un problema de orden penal, sino social, reivindicando la derogación de la ley.

“La propiedad privada es inviolable salvo que ocupen seccionales coloradas. Devuélvannos los espacios verdes. Queremos nuestras plazas de vuelta. Salgan por favor”, le retrucó Desirée Masi a Riera.

Le recordó incluso que fue intendente de Asunción. Sugirió a los colorados hacer un mea culpa y abandonar los espacios verdes.

Negó que hayan disminuido las ocupaciones, y en donde más se dan es en Central con los asentamientos.

Hugo Richer hizo alusión a todo lo que se robó en la dictadura, citando 7,8 millones de tierras malhabidas.

Remarcó que hasta el momento no funciona la comisión que se había creado para estudiar el mecanismo de recuperación de esas tierras, indicando que las instituciones ni siquiera envían la lista de sus representantes.

Como una forma de continuar el debate, planteó que el jueves 23 se trate la derogación de la Ley Riera–Zavala. Hubo un abierto rechazo por parte del cartismo, que hasta Riera, que estaba a favor, al final se abstuvo.