EFE
SÃO PAULO - BRASIL
Miles de mujeres se manifestaron ayer en varias ciudades de Brasil contra el ultraderechista Jair Bolsonaro al grito de “Él no”, después de una masiva movilización en las redes sociales contra el candidato líder en intención de voto.
Las protestas de ayer canalizaron la creciente insatisfacción de una parte de las brasileñas contra Bolsonaro, un nostálgico de la última dictadura militar y polémico por un historial de declaraciones racistas, homófobas y machistas, aunque también hubo actos en apoyo del candidato.
Una de las mayores concentraciones contra Bolsonaro tuvo lugar en São Paulo este sábado, el mismo día en el que el abanderado del Partido Social Liberal (PSL) recibió el alta tras más de tres semanas hospitalizado al sufrir una puñalada durante un acto de campaña. “Estoy aquí por un bien mayor, contra un candidato totalmente homofóbico, fascista, racista”, afirmó la joven Camila Palmeira, de 23 años. El objetivo de la protesta, convocada en las redes sociales, tiene como objetivo frenar la victoria de Jair Bolsonaro, al frente de la carrera electoral con 28% de intención de voto, pero también con un elevado rechazo entre los electores, especialmente entre las mujeres.
PERDERÍA EL BALOTAJE. Según las últimas encuestas, Bolsonaro se enfrentaría en una segunda vuelta a Fernando Haddad, sucesor de Luiz Inácio Lula da Silva, pero perdería en el balotaje. El propio Bolsonaro afirmó la víspera que no reconocerá un resultado en las urnas que no sea su triunfo y subrayó que una victoria del Partido de los Trabajadores de Haddad supondría fraude.
“Como abogada vi un retroceso en la democracia brasileña y esta manifestación es un espacio para afirmar que el pueblo brasileño no va a aceptar ningún retroceso en las libertadas democráticas en nuestro país, que fueron muy caras, muchos fueron presos y otros están todavía desaparecidos”, señaló la abogada Ana Luzia Marchiori.
Para Thiago Ribeiro Riveira, quien acompañó la marcha de las mujeres en São Paulo, los brasileños concentrados en la manifestación están unidos por una causa común: frenar la llegada al poder de Bolsonaro. “Creo que él representa una amenaza a nuestra democracia. Estamos en un momento muy delicado y necesitamos unirnos. La sociedad brasileña es diversa y estamos todos unidos contra la misma causa, contra ese candidato que amenaza varios valores que tardamos años en construir”, explicó.
En medio de la manifestación convocada por mujeres para expresar su rechazo a Bolsonaro, seguidores del candidato organizaron actos en diversas ciudades para mostrar su apoyo al capitán de la reserva, que en las últimas semanas moderó su discurso y afirmó que sus polémicas declaraciones fueron malinterpretadas.
Bolsonaro, un firme defensor de la liberación de las armas en Brasil que reunió el descontento de una parte de la población contra el PT y la corrupción de los partidos políticos, salió ayer del hospital tras permanecer ingresado más de tres semanas por una puñalada sufrida el 6 de setiembre en Juiz de Fora. El militar retirado, plenamente recuperado, se trasladó a Río de Janeiro, donde reposará en su casa y evaluará su participación en el último debate televisado el jueves antes de las elecciones del 7 de octubre.