El secretario general del Instituto de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert), Édgar Taboada Insfrán, fue removido del cargo luego de haber remitido una nota a la Fiscalía Anticorrupción en la que señaló que el caso de Marcial Speranza, secretario y presunto testaferro del diputado José María Ibáñez, no representó una pérdida en los registros contables de la institución.
Speranza está actualmente procesado por lesión de confianza. La fiscala Yolanda Portillo lo imputó por el delito de estafa, por supuestamente hacerse pasar por un potentado ganadero para acceder a un inmueble fiscal en el Chaco.
Semanas atrás, por pedido del abogado Arturo Daniel, defensor de Speranza, el Ministerio Público solicitó al Indert que conteste si los recibos de dinero emitidos por la institución para el secretario del diputado “figuran en los registros contables como pérdidas o se hallan previsionados”.
El 18 de junio pasado el entonces secretario general Taboada envió una nota a la fiscala Portillo en la que simplemente adjuntó todas las documentaciones referentes al caso de Speranza.
Dos días después, envió una nueva nota para “complementar” el informe previo. Esta vez Taboada adjuntó un informe de Registración Contable en la que se consigna que los pagos de Speranza no están registrados como pérdida ni están previsionados.
Esta nota, según indicaron fuentes judiciales, beneficia a Speranza, porque da argumentos a sus abogados para sostener que no hubo un perjuicio patrimonial al Indert y que, consecuentemente, no hubo estafa. Con esto la misma víctima del delito, el Indert, reconoce que no hubo un daño a la institución, comentaron.
RECTIFICACIÓN. Sin embargo, días atrás Justo Cárdenas, el presidente del Indert, remitió una nueva nota a la Fiscalía Anticorrupción en la que desautorizó el documento remitido por Taboada.
En la nueva nota, Cárdenas informó a la Fiscalía que si bien el caso de Speranza no figura en los registros contables del Indert como pérdida o previsionado, esto no significa que no se haya generado un perjuicio al Indert.
El documento explica que el caso de Speranza recién puede ser consignado como pérdida en los registros contables una vez que exista una resolución firme sobre el proceso administrativo que se abrió por la adjudicación de las tierras.
En febrero pasado, el Indert revocó la adjudicación del inmueble a Speranza. Esto fue apelado ante un tribunal en lo contencioso administrativo por el secretario del diputado. Recién una vez que se defina esto, el caso podrá ser incluido en los registros contables.
Además la fiscala Portillo solicitó un nuevo informe al Indert, para saber si la institución considera un perjuicio haber dado tierras a una persona que no es beneficiaria de la reforma agraria. Justo Cárdenas respondió que esto efectivamente representa daño patrimonial.
Según confirmaron ayer fuentes oficiales del Indert, Arcadio Mora ya fue designado como el nuevo secretario general de la institución.