La primera prueba se dio en la discusión sobre los royalties, que fue propuesta del Ejecutivo, para que pueda disponer un porcentaje en la lucha contra la pandemia.
El único vocero del abdismo, en su carácter de titular de la Comisión de Hacienda, fue el senador Silvio Ovelar.
El mismo hizo una amplia exposición sobre el tema, detallando el monto, de USD 40 millones que podría disponer el Ejecutivo para Salud.
En el momento en que comenzaron los discursos por parte de los cartistas, llanistas y luguistas en defensa de que los recursos se mantengan para los municipios, ninguno de Añetete intervino para refutar.
En un momento dado, Beto Ovelar hizo una confusa intervención, mostrándose supuestamente desconcertado.
Los senadores de Patria Querida y PDP hicieron sus reclamos sobre los cambios que se estaban dando.
Inclusive Fidel Zavala pidió una reconsideración de los votos, que no corrió.
Ya cuando se definió todo, y quedó que los intendentes y gobernadores seguirán manejando los royalties, el abdista Martín Arévalo pidió que conste su voto en contra.