Con un humor poco elaborado pero espontáneo, Manuel El Loco Valdés se había ganado el cariño y las carcajadas del público mexicano a través de la pantalla pequeña, la grande y también en los teatros durante una extensa carrera de siete décadas, en las que se dedicó a hacer lo que su apodo bien definía: El loco. No tenía ningún tipo de vergüenza: Bailaba, cantaba, gritaba, y todo sin libreto.
Podía contar un mal chiste, hacer imitaciones o fingir ser un orangután, pero Fernando Manuel Alfonso Gómez de Valdés y Castillo, nacido en Ciudad Juárez en 1931, siempre conseguía arrancar una carcajada del público.
Con su fallecimiento, México pierde al tercero de cuatro hermanos que fueron iconos representativos, entre ellos, Ramón Valdés, conocido como don Ramón en El Chavo del Ocho. Fue pareja de la reconocida actriz Verónica Castro, con quien tuvo un hijo, el hoy cantante Cristian Castro.
Y aunque ya había aparecido en televisión bailando junto a vedetes, su primera participación estelar fue en el programa Variedades al mediodía (1954-1957), donde demostró su desenvoltura. Eso le permitió participar en diferentes programas cómicos hasta presentar El show del Loco Valdés. En el cine destacan los filmes Cada quien su música (1958), El tigre negro (1962), Detectives y ladrones (1966), y otros. Además, participó en el doblaje de Peter Pan (2002), La Leyenda de Nahuala (2007), entre y otras. EFE