En el país, el 60% de las mujeres que llega a los controles están en estado avanzado de la enfermedad, comentó la doctora Marina Ortega, jefa del Programa Nacional de Prevención, Detección Precoz y Tratamiento del Cáncer de Cuello Uterino y Mama (PRONAC).
Por día tres nuevos casos son detectados y en la semana llegan a 20. De esta cifra la mitad llega cuando la enfermedad ya presenta un cuadro irreversible. “Aproximadamente 10 mujeres en el país están muriendo de cáncer de cuello uterino cada semana. Y de esa cifra, el 60% corresponde a mayores de 40 años”.
Causa. La razón principal de este alto porcentaje, tiene como causa la no realización del papanicolau (PAP). “Estos estudios avanzados que encontramos son mujeres que nunca se hicieron la prueba o se la hicieron hace tres o cinco años. Cuando acuden es por sangrado o dolor, porque en etapas iniciales el cáncer no duele”, especificó Ortega.
Varios factores contribuyen a que muchas mujeres no se realicen su control. Tabúes, falta de información y mitos tienen su peso. Recordó que por ley las mujeres cuentan con dos días de permiso para realizarse el papanicolau.
Entre los mitos se mencionan las mujeres que se niegan a que les examinen sus partes íntimas. Otras se niegan a que sea un hombre el que haga el diagnóstico. El machismo también está presente cuando la pareja se opone a que ella se haga el control.
Se suman las creencias de que en el examen se contagió de VPH, que si aparece algo anormal en los resultados será algo determinante para su salud o que el estudio genera dolor. “Si se detecta, las enfermedades generadas por el virus del papiloma humano son curables en un 100%”, enfatizó Ortega.
Destacó que el acceso a la tecnología genera una mayor conciencia en las mujeres, sobre todo en las más jóvenes para acudir al médico. El porcentaje de tratamiento también es bajo, se sitúa cerca del 60%. El año pasado en centros públicos 250.000 mujeres se realizaron el PAP. Básicamente se estaría llegando a 500.000 en el sector femenino. Sin embargo, teniendo en cuenta que la franja etaria de riesgo está entre los 25 y 49 años, 1.300.00 mujeres están bajo riesgo, detalló Ortega.
Prevención. Educación, vacunación, utilización de preservativos y el retraso en el inicio de la vida sexual también contribuyen a prevenir estas situaciones.
El año pasado 71.705 niñas recibieron las dos dosis contra el VPH, según datos del Programa Ampliado de Inmunización (PAI). Desde el 9 de marzo se iniciará la vacunación en instituciones educativas públicas y privadas.