“Las sanciones más altas que jamás se han impuesto sobre un país”, presumió Trump, que habló en el Despacho Oval.
El Gobierno estadounidense acusa al Banco Central iraní de financiar desde 2016 con miles de millones de dólares a la Guardia Revolucionaria iraní, a la iraní Fuerza al Quds y al grupo chií libanés Hizbulá, todos ellos considerados grupos terroristas por Washington. “Esto es muy importante. Ahora hemos cortado todos los posibles fondos para Irán”, manifestó el secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin.
Por su parte, el gobernador del Banco Central iraní declaró que las nuevas sanciones estadounidenses contra la institución son una demostración de la nula capacidad de influencia de Washington. “Las sanciones del Gobierno de EEUU contra el banco central muestran de nuevo su nula capacidad de influencia contra Irán”, indicó el gobernador Abdolnaser Hemmati. AFP-EFE