Según el último informe del Ministerio de Ambiente, el miércoles permanecían activos diez focos de incendio en Corrientes, cinco de ellos en los alrededores de Iberá, considerado como una de las mayores reservas ecológicas del país suramericano.
Hasta el momento, los fuegos han consumido un total de 785.238 hectáreas (casi un 9% de toda la superficie provincial), de las cuales 245.110 corresponden a esteros, 225.015 a pastizales y otras 28.733 a bosques nativos, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), actualizados el pasado 16 de febrero.
Situado en la región septentrional de Corrientes, el Parque Nacional del Iberá es un enclave natural de más de 183.000 hectáreas que alberga esteros, pastizales subtropicales y selvas de bosques nativos, en donde conviven más de 4.000 especies de flora y fauna silvestres.
Esos pastizales están acostumbrados a la presencia de fuegos esporádicos, que eliminan los arbustos para que el ecosistema siga creciendo, pero los incendios declarados a principios de enero son únicos en sus dimensiones y virulencia, debido a una combinación fatídica de sequía prolongada, temperaturas extremas y baja humedad.
“Como no hay agua y hay temperaturas altísimas, tenemos muchísimos focos de incendio que afectan superficies enormes y con una intensidad terrible”, señala a Efe Sebastián di Martino, biólogo y director de conservación de Rewilding Argentina, una organización responsable de varios proyectos de reintroducción de especies en Iberá. “El impacto sobre la fauna va a ser alto. Los carpinchos, los yacarés y los ciervos de los pantanos buscan lugares con agua y hoy no hay lugares con agua, son muy chiquitos, entonces quedan rodeados por el fuego y se mueren”, agrega.
RECONSTRUCCIÓN. Por ese motivo, el gobernador provincial, Gustavo Valdés, anunció un programa valorado en 400 millones de pesos (unos 3,7 millones de dólares) para favorecer la “reconstrucción” del parque.
“Vamos a salir a buscar los recursos necesarios... para que este patrimonio de los correntinos, que es el Iberá, se convierta en patrimonio también de los argentinos y del mundo”, aseveró Valdés a los medios de prensa.
183.000
hectáreas tiene el Parque Nacional Iberá, donde conviven más de 4.000 especies de flora y fauna silvestres.