“Cuando me dijeron que me iban a duplicar el dinero por medio de una promoción, dije que esa plata me vino del cielo porque estoy pasando por un mal momento; mi papá está enfermo y debía pagar por su tratamiento en Caaguazú", relató doña Dorotea Rojas Molinas (52), víctima de una estafa por falsos funcionarios de telefonías.
“Me llamaron en un momento muy difícil. Me estafaron 1.570.000 guaraníes, se hicieron pasar por un ingeniero para hablarme de la promoción por ser cliente fiel. Me prometieron que si cargaba mi billetera de Tigo en un nuevo número que luego iban a entregarme para mi línea, iban a pagarme el doble del dinero que utilicé para cargar. Finalmente, les pasé el monto, me vaciaron y me bloquearon”, señaló la afectada quien pidió que los responsables del ilícito sean detenidos para evitar que haya más víctimas.
“Cada vez que me acuerdo del caso, me siento mal, pido por favor que la Policía descubra a los responsables y que la gente esté alerta para no caer en este engaño”, manifestó la afectada del nuevo modus operandi de estafadores, que engañan prometiendo dinero o saldos por utilizar el sistema de la billetera (Personal-Tigo).
MÁS VÍCTIMAS. Carlos Sanabria es docente. Al mismo le prometieron que si cargaba su billetera de Tigo, iba a recibir cuatro veces más del saldo a su teléfono.
Pidió a su hermana que le cargue por el sistema por la suma de 1 millón de guaraníes, luego usó de la misma el dinero por el mismo valor.
Un falso ingeniero de la telefonía Personal lo llama a su celular, como en el caso de doña Dorotea. Le explica el proceso que debe seguir para obtener el beneficio, pero lo más importante es revelar el pin. Al contar este dato, vaciaron su billetera electrónica.
El docente pide que se indague a funcionarios de la telefonía ya que antes de ser despojado del dinero, comunicó a la empresa y le dijeron que iban a comunicarse con él. Coincidentemente lo llaman, pero era el estafador, quien exigía concretar la operación. “Soy listo, pero esta vez caí fácilmente, saben convencer”, dijo el docente.
La Policía insta a no revelar el pin de las billeteras ni datos personales.