Pasadas las 13:30 hora local (17:30 GMT), Llaitul fue arrestado en un restaurante en la ciudad de Cañete, 550 kilómetros al sur de la capital chilena, “sin oponer resistencia”, según la Policía de Investigaciones de Chile (PDI).
Minutos después fue trasladado en helicóptero hasta un cuartel policial en la vecina Temuco, capital de la región de La Araucanía y epicentro del llamado “conflicto mapuche”, que enfrenta desde hace décadas al principal pueblo indígena chileno con el Estado y grandes empresas forestales y agrícolas.
El líder de la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM), una agrupación indigenista que reivindica periódicamente ataques incendiarios contra latifundistas en el sur, está imputado por presuntos delitos de “hurto de madera, usurpación y atentado contra la autoridad”.
DESDE 2020. La detención de Llaitul, que el jueves pasará a disposición judicial, se enmarca en una investigación iniciada en 2020 tras una denuncia presentada por la Administración anterior, encabezada por Sebastián Piñera (2018-2022).
Pese a negarse en un inicio, el actual Gobierno del presidente Gabriel Boric amplió la denuncia contra Llaitul el pasado julio luego de que este llamara a continuar los sabotajes.
Llaitul, de 54 años, es uno de los rostros más visibles de la lucha armada mapuche y fue fundador en 1997 de la CAM, una agrupación que busca la “liberación nacional” del pueblo mapuche y de la que se han desmarcado grupos más radicales como la WAM (Weichán Auka Mapu).
La detención tiene lugar 11 días antes de que los chilenos aprueben o rechacen en las urnas la propuesta de nueva Constitución que busca sustituir al texto actual, heredado de la dictadura militar.
Se desconoce el impacto que podría tener en la histórica votación del 4 de setiembre, aunque los expertos advierten que podría influir en los más de indecisos. EFE