Durante los monitoreos en áreas comerciales de soja, los técnicos encontraron casos de la enfermedad con diferentes niveles de severidad. Las parcelas afectadas corresponden a los distritos de San Cristóbal, Cedrales, Santa Fe del Paraná y Santa Rita, en el Departamento de Alto Paraná, y Katuete y Puerto Adela, en Canindeyú.
El Senave recomienda a los productores realizar dos verificaciones semanales en las parcelas para la detección temprana de la enfermedad y la aplicación de fungicidas para frenar su propagación.
La excesiva humedad facilita la diseminación de la roya, una de las enfermedades más importantes en el rubro de la soja. Debido a las lluvias constantes, los trabajos de control con agroquímicos se atrasaron, lo que contribuyó a su propagación. Aún se desconoce el impacto que pudieron causar a las plantas.