Cuentos de Navidad pretende llevar magia, ilusión y esperanza en cada niño, joven o adulto que escuche. Unos sesenta voluntarios de diferentes ámbitos recorren el país en los lugares más vulnerables para llenarlos de cariño a través de la lectura de cuentos.
Se trata de una actividad ya tradicional en esta época del año, que congrega a escritores, periodistas, productores culturales, narradores orales y cinco coordinadores, encargados de la organización.
La actividad solidaria se lleva a cabo desde el 2 hasta el 27 de diciembre, en hospitales, albergues, comedores y hogares de ancianos del Departamento Central, Villarrica, Encarnación y Concepción. En estos sitios, los voluntarios leen cuentos, narran historias y llevan libros de obsequio a los internados del lugar.
Uno de sus organizadores, el escritor Alejandro Hernández, comenta que la idea nace luego de su participación en la feria, de fomento de la lectura y el libro, desarrollada en la ciudad de San José de Mayo (Uruguay).
“En una oportunidad, una conocida nuestra nos pidió libros para el aula hospitalaria del IPS, y fue allí que se nos ocurrió replicar la experiencia (de Uruguay) con la visita de escritores y narradores a la previsional, teniendo en cuenta que en las fechas cercanas a Navidad, estos niños internados, alejados de sus familias, necesitan un momento de distracción y alegría, aunque sea por unos pocos momentos”, rememora Alejandro.
Debido a la repercusión favorable en aquella ocasión, al año siguiente se replicó el proyecto ya con el apoyo de la Secretaría de Cultura. La iniciativa incluía otras aulas hospitalarias del Departamento Central. Años después se sumaron los albergues de niños en riesgo de calle, así como otros centros de ayuda.
En la actualidad, visitan unos 35 lugares, con el apoyo de unos 60 voluntarios, entre ellos: Miguel Ángel Florentín, Milia Gayoso, Aura Brítez, Delfina Acosta, Óscar Pineda, Estela Franco, Luz Saldívar y Julio Sotelo, entre otros.
Valoración. Para la escritora y periodista Milia Gayoso esta actividad tiene un valor incalculable, a nivel personal y profesional.
“Soy una de las voluntarias que lleva un poco de lectura, cuento y cariño a los niños enfermos de cáncer, a los comedores y hogares de ancianos. Esta experiencia nos reconforta al recibir cada abrazo y cariño de esos niños, de todas estas personas. Eso no tiene precio”, señala.
El proyecto no cuenta con financiación propia, sino que se basa en las donaciones, tanto de tiempo como a nivel pecuniario de los mismos impulsores y colaboradores directos. “Los voluntarios donan su tiempo, incluso, en algunos casos, abonan pasajes y hoteles”, señala el escritor Hernández.
En cuanto al contenido de las jornadas, los títulos de las lecturas varían según la preferencia de los voluntarios o a pedido de los niños y adultos beneficiarios. “Algunos prefieren cuentos propios u obras clásicas”, explica Alejandro.
Llevar la lectura a los niños es una pasión de estos voluntarios, puesto que incluso llevan a sus hijos disfrazados o incorporan instrumentos musicales a los relatos.
“Es una actividad donde todos dan mucho de sí, cantan, bailan y, por sobre todo, donde expresan lo maravilloso de formar parte de esta experiencia”, acota el escritor.
Para agendar
Fecha: Hoy, a las 8.30.
Lugar: Hospital Nacional de Itauguá.
Lectores: Johani Vega y Aura Brítez.
Fecha: Lunes 9, a las 9.00.
Lugar: Centro Abierto Niño Salvador del Mundo, Villeta.
Lectores: Delfina Acosta y Óscar Pineda.
Fecha: Martes 10.
Hora: 8.30.
Lugar: Hospital de Clínicas de la ciudad de San Lorenzo.
Lectores: Milia Gayoso y María Irma Betzel.
Fecha: martes 24.
Hora: 9.00.
Lugar: Hospital Pediátrico Niños de Acosta Ñu.
Lectores: Feliciano Acosta, Vidalia Sánchez y María Gloria Pereira.
Apoyan: SNC, MEC, Holding Paraná (Encarnación), editoriales: Servilibro, En Alianza, Atlas, Fausto Cultural, Editorial Rosalba, Arandura y Fundación En Alianza.
