Además, no todo su gobierno está a favor. El contralor Camilo Benítez es contrario a la ley y mientras se aguarda que Peña promulgue, pararon las capacitaciones y elaboración de formulario en la Contraloría, ya que sería un doble trabajo para los funcionarios. Eso debido a que la ley vigente establece información completamente diferente a la prevista en el proyecto sancionado por el Congreso.
Este es uno de los motivos por el que Benítez ordenó una prórroga hasta el 30 de abril para la presentación de las declaraciones juradas de intereses.
“La prórroga es para todos porque nosotros realizamos un formulario digital que requiere información detallada que ahora mismo con la modificación tenemos que eliminar. Es decir, tenemos que trabajar en un modelo nuevo de formulario. Como el Congreso ya aprobó, consideramos prudente esperar que el presidente promulgue y ahí implementamos el nuevo formulario o que vete y ahí mantenemos el formulario actual”, explicó el contralor.
Benítez señaló que la diferencia entre una y otra información requerida es grande, sobre todo en cuanto a la declaración de familiares en la función pública.
“Demasiado grande es la diferencia en cuanto a la información requerida para parientes, por consanguinidad y por afinidad. Nosotros estamos totalmente en contra del cambio, pero en estas condiciones creemos que es absurdo pedirles, instruirles en cursos, hacer que nuestros funcionarios trabajen arduamente sobre algo que al final vamos a tener que entrar y eliminar del sistema”, sostuvo el contralor sobre el formato de datos.