El Gobierno mexicano insistió en que “solo hubo heridos y ninguna persona fallecida”, pero en el país azteca desmienten a sus autoridades respaldándose en los videos que circulan donde efectivamente aparecen cuerpos de aficionados del Atlas tirados en el piso sin aparentes signos de vida.
Sin embargo, se confirmó más tarde que el saldo sería de al menos 15 muertos y casi 50 heridos. El fútbol mexicano se paralizó y se aguarda una dura sanción para Querétaro. Se habla incluso de que podría ser desafiliado de la Liga MX.
Mikel Arriola, presidente de la Liga MX, anunció ayer que “ya no habrá barras visitantes en los estadios”. Además, llamó a asamblea para mañana.