Gerardo Stadecker Brom, principal sospechoso del crimen de su esposa Sabryna Breuer, sucedido en diciembre del año pasado, habría intentado a través de sus contactos familiares tener privilegios en su lugar de reclusión.
Fuentes penitenciarias confirmaron que los allegados de Stadecker realizaron varios intentos por trasladar al hombre del Penal Padre Juan Antonio de la Vega, de Emboscada, –lugar donde está preso desde el pasado 20 de diciembre– hasta el pabellón Libertad de Tacumbú.
Stadecker tiene familiares ligados a la fundación Princesa Diana, que tiene mucha influencia dentro del sistema penitenciario, además de ser una de las que ayudó a la creación de la marca Mua.
De los contactos –según nuestra fuente– se encargó una mujer que incluso llamó al pastor Ignacio Chamorro, encargado del pabellón Libertad, solicitándole un lugar para Stadecker.
Este, sin embargo, habría contestado que no dependía de él y la derivó al director del penal, Luis Villagra, a quien le toca la responsabilidad de decidir sobre las ubicaciones de los internos.
intentos. Los parientes de Stadecker en todo el tiempo presionaron al Ministerio de Justicia para que se realice el traslado interno de Emboscada a Tacumbú, pero como no le fue posible, intentaron hacer esto vía judicial.
La consigna era que el sospechoso pueda pasar los días de encierro en medio de ciertas comodidades como estar solo en una habitación, disponer de una cama cómoda, aire acondicionado y otros lujos.
Se mencionó incluso que el hombre estaría bajo el cuidado de Ignacio Calonga Meza, interno del penal de Tacumbú que está recluido por delitos relacionados al narcotráfico, que le pondría una persona de su confianza para cuidarlo.
Sin embargo, hasta el momento no se pudo dar dicho traslado. Actualmente, se encuentra recluido en una celda común junto a otras tres personas, en el sector B baja del penal de Emboscada.
Denuncia policial por amenazas
Fátima Beatriz Román, días antes de lo sucedido había denunciado a Sabryna Breuer en la Comisaría 50ª Central de Luque. La mujer, que es una cantante de cumbia reconocida en el medio, relató que era víctima de amenaza por parte de Sabryna, que –según afirma en la denuncia– la hostigaba a través de llamadas telefónicas, en las que la insultaba con palabras irreproducibles.
Según Román, en las llamadas y mensajes de texto que recibía, le reclamaban que ella supuestamente estaba manteniendo una relación sentimental con Gerardo Stadecker. El actual detenido y sospechoso del crimen de su esposa había declarado que una semana antes del fatal suceso mantuvieron una fuerte discusión por celos, debido a que ella, supuestamente, le reclamaba una infidelidad.
Fátima Román negó haber tenido una relación con Stadecker y pidió que el caso sea esclarecido
