Esto es lo que contempla la Resolución N° 198/2022, emitida recientemente por el Consejo Nacional de Educación Superior (Cones) y que busca establecer un Registro Unificado de Matriculaciones y Datos Académicos de los Programas de Pregrado, Grado y Posgrado del área de Ciencias de la Salud.
Narciso Velázquez, presidente del ente rector, explica que esta medida se tomó con la intención de “tener una trazabilidad” con respecto a los estudiantes, a saber sobre la evolución de su proceso académico. Ocurre que existe una aumento de la “movilidad” de alumnos, especialmente de Medicina, que empiezan la carrera en una institución o filial de alguna universidad y terminan en otra.
De este modo, en palabras de Velázquez, podrán corroborar los documentos que avalen la efectiva formación de cada uno de esos estudiantes.
Coincide en que el detonante para esta resolución fue lo acontecido en la Universidad Privada María Serrana (UPMS), donde saltaron una serie de irregularidades sobre convalidaciones a estudiantes que, conforme a los documentos ofrecidos, terminaron Medicina en tres años.
El Cones comunicó que esta normativa es de “cumplimiento inmediato”. Los datos correspondientes al primer semestre de este año deberán realizarse para el 29 de julio y los del segundo semestre, para el día 31 de agosto próximo.
La presentación, a su vez, tendrá carácter de declaración jurada. Por lo que, en caso de detectarse inconsistencias o irregularidades, el ente rector procederá a aplicar lo establecido en la Resolución 166/15 de intervención con posibilidad de clausura de la carrera afectada.
“Todas las instituciones que tienen carreras de ciencias de la salud, particularmente Medicina, deben enviar datos específicos sobre sus matriculaciones a partir del año 2022; eso implica ya desde el primer semestre. Ahora tienen tiempo por un mes para pasar el dato del primer semestre y luego, a partir del mes de agosto, pasar datos del segundo semestre”, anuncia Velázquez.
Lo que el órgano requiere –dice– no son solo datos estadísticos, sino precisiones sobre los nombres y antecedentes de cada uno de los estudiantes. También se pide información sobre los docentes y directivos.
“El Cones necesita hacer una trazabilidad de las matriculaciones, desde el inicio hasta su final. Porque encontramos una manera difícil de hacer un seguimiento por la movilidad que está habiendo, particularmente en algunas instituciones”, apunta.
SOSPECHOSO. Señala que hay universidades que tienen escasa matriculación en los primeros cursos, pero presentan una alta matriculación en los últimos cursos. Por lo que buscan “tener datos precisos”.
La movilidad estudiantil, de una entidad a otra o de una filial a otra, según el titular del Cones, da lugar a una “incerteza del proceso formativo”.
Es por eso que la intención es verificar los elementos con los cuales “se pueda sustentar la formación o el proceso formativo de los estudiantes del área de la salud”, insiste.
Y pone el ejemplo de una situación que sospechan pueden llegar a encontrar: “Vamos a suponer que un estudiante aparezca en el décimo semestre y no tenemos reporte nosotros sobre dónde hizo los semestres anteriores. Entonces ahí, definitivamente, algo ocurre”.
En cuanto a Medicina, refiere que existen 38 ofertas en el sistema. Velázquez reconoce que el “universo es enorme”, al hacer referencia sobre las demás titulaciones del área de las ciencias de la salud.
Admite que el sistema de educación superior se encuentra en un “desorden”; a pesar de las normas y esfuerzos por depurar ofertas académicas.
Hay instituciones con muy poca matriculación en los primeros cursos; sin embargo, tienen una alta matriculación en los últimos cursos.
Narciso Velázquez,
presidente del Cones.