En algún momento el estrés invade al organismo. Es una reacción normal a un desafío o un cambio, pero si es prolongado puede afectar a la salud.
La sicóloga clínica Gilda Picaguá comenta acerca de cómo evitar que el estrés traiga consecuencias negativas a la salud, enseñando maneras saludables para manejarlo.
RECONOCER EL ESTRÉS
Todos experimentan el estrés de manera diferente. Es posible que se manifieste con la irritabilidad o el enojo, también puede causar insomnio, dolor de cabeza o malestar estomacal.
Según la especialista, el primer paso para manejar el estrés es reconocer su presencia.
Es importante identificar las situaciones que pueden provocar el estrés. Estas situaciones se conocen como tensionantes. Las mismas pueden ser la familia, la escuela, el trabajo, las relaciones, el dinero o los problemas de salud.
“Las causas pueden ser varias, entonces tratar de tener prioridades, es decir, tratar de diferenciar dentro de todas las actividades cuáles son las prioritarias e imprescindibles”, dice la sicóloga.
Otra de las acciones a tomar es tratar de pensar de forma diferente.
“Disminuir la preocupación excesiva admitiendo que hay cosas que pueden modificarse y otras que no”, sostiene.
Una vez que se identifique de dónde viene su estrés se podrán idear maneras con las cuales lidiar con las tensionantes.
TÉCNICAS PARA MANEJAR EL ESTRÉS
Existen muchas maneras de manejar el estrés. Si se encuentra en una situación tensionante la especialista en salud mental primeramente recomienda reconocer las cosas que no se puede cambiar.
“Dejar de lado aquellas cosas que en ese momento no son tan primordiales para sentirse menos agobiado por sobrecarga de actividades”, sugiere.
Otra acción que ayuda a manejar o evitar el estrés es reconociendo las cosas que no se pueden cambiar.
“Aceptar que no puede cambiar ciertas cosas le permite dejarlas ir y no alterarse. Por ejemplo, no puede cambiar el hecho de que debe conducir durante la hora pico. Pero puede buscar maneras de relajarse en el trayecto, como escuchar música”, refiere
También es importante evitar las situaciones estresantes. “Siempre que le sea posible, aléjese de la fuente del estrés. No conectarse con situaciones problemáticas o involucrarse con personas tóxicas”, recomienda.
Realizar actividades físicas todos los días es la mejor y más fácil manera de lidiar con el estrés. Al hacer ejercicio, su cerebro libera químicos que lo hacen sentir bien. También puede ayudarle con su energía reprimida o su frustración.
“Busque algo que disfrute, ya sea caminar, andar en bicicleta, bailar, y hágalo por al menos 30 minutos al día”, enfatiza.
También es necesario cambiar la perspectiva, desarrollando una actitud más positiva ante los desafíos. “Puede hacerlo reemplazando los pensamientos negativos con pensamientos más positivos”, finaliza.
